ERMITA DE SAN SEBASTIÁN
La Ermita de San Sebastián data del siglo XIII.
En sus orígenes fue morabito, un lugar de oración musulmán. Es el único de su tipo que aún se conserva.
Es especialmente importante porque junto a este edificio Boabdil entregó las llaves de Granada a los Reyes Católicos en 1492. Inmediatamente después se celebró allí la primera misa después de ocho siglos de ocupación musulmana.
Fue consagrada a San Fabián y San Sebastián y pasó a ser lugar de culto cristiano hasta que, en el siglo XIX, perdió su función religiosa para pasar a manos del Ayuntamiento de la ciudad.
Actualmente forma parte de la Parroquia de San José de Calasanz.